Indicaciones generales

José R. Yuste, Luis López Olaondo, Irene Aquerreta



La infección del sitio quirúrgico es una de las complicaciones más frecuentes en los pacientes hospitalizados y representa la 3ª causa de infección nosocomial, tras la infección urinaria asociada a sondaje vesical y la neumonía nosocomial.

La riesgo de infección postquirúrgica depende del grado de contaminación bacteriana en el territorio de la cirugía. Una de las medidas más importante para su prevención es la profilaxis antibiótica prequirúrgica, por lo que el objetivo que persigue esta medida es disminuir la tasa de infección postoperatoria, especialmente la infección de la herida quirúrgica en los enfermos de riesgo.

Sin embargo, no hay que olvidar que su uso inapropiado puede generar problemas entre los que destacan el aumento del riesgo de infección del sitio quirúrgico, el aumento del coste sanitario y la selección de mecanismos de resistencia.

Indicaciones de profilaxis antibiótica en cirugía

Las indicaciones de la profilaxis quirúrgica están bien establecidas y dependen del tipo de cirugía:

LIMPIA

Menos del 5% de las cirugías

Definición

Cirugía en la que NO se interviene sobre mucosa respiratoria, digestiva o genitourinaria, sin signos de inflamación en la zona a intervenir y en la que NO hay ruptura de la asepsia quirúrgica.

Indicaciones de profilaxis

NO existe indicación de PROFILAXIS ANTIBIÓTICA, excepto:

  1. Procedimiento quirúrgico con colocación material protésico.
  2. Procedimiento quirúrgico en los que la infección puede tener consecuencias catastróficas (neurocirugía, cirugía cardíaca, etc.)
  3. Procedimiento quirúrgico con tiempo quirúrgico superior a 3 horas.
  4. Procedimiento quirúrgico sobre pacientes con criterios adicionales por el riesgo anestésico y la patología previa.

LIMPIA-CONTAMINADA

5-10 % de las cirugías

Definición

Cirugía en la que se interviene sobre mucosa respiratoria, digestiva (excepto colon) o genitourinaria, sin que se produzca ningún vertido significativo y sin que existan signos inflamatorios en el sitio quirúrgico o la intervención realice sobre tejidos habitualmente sin microorganismos, pero es muy traumática.

Indicaciones de profilaxis:

SI existe indicación de PROFILAXIS ANTIBIÓTICA.

CONTAMINADA

15-25 % de las cirugías

Definición

Cirugía en la que existe inflamación aguda (sin pus) en el sitio quirúrgico, hay derrame del contenido de una víscera, hay ruptura de la asepsia quirúrgica; o ante heridas abiertas de menos de 4 horas de evolución.

Indicaciones de profilaxis:

SI existe indicación de PROFILAXIS ANTIBIÓTICA.

SUCIA

Más del 40 % de las cirugías

Definición

Cirugía en la que hay pus, o perforación de víscera hueca, o ante heridas abiertas de más de 4 horas de evolución.

Indicaciones de profilaxis:

  1. NO existe indicación de PROFILAXIS ANTIBIÓTICA.
  2. Hay indicación de TRATAMIENTO ANTIBIOTICO.

Utilización de antibióticos en la profilaxis quirúrgica

  1. Como norma general debe utilizarse un antibiótico único, a ser posible bactericida, de bajo coste y espectro bacteriano reducido, que mantenga una concentración sérica elevada durante toda la intervención y que sea activo frente a la mayoría de los microorganismos colonizantes. Hay que tener en cuenta el perfil de resistencias de aislamientos previos y la posibilidad de que el enfermo esté colonizado por microorganismos multiresistentes.
  2.  La profilaxis debe administrarse en los 30-60 minutos antes de la incisión. En el caso de los betalactámicos, deben administrarse inmediatamente antes de la misma.
  3.  Siempre se administra por vía intravenosa en infusión rápida y en dosis elevadas.
  4. Como norma, la administración de una dosis del antibiótico es suficiente y en todo caso no es recomendable prolongarla más de 24 horas.
  5.  Hay que valorar la administración de dosis suplementarias intraoperatorias de antibiótico en caso de cirugía prolongada ( superior a 3 horas ) y/o cuando las pérdidas sanguíneas sean superiores a 1.000 cc.
  6.  Para la mayoría de los procesos quirúrgicos, la cefazolina es el antibiótico más utilizado y las cefalosporinas de 3ª generación no deben utilizarse de forma sistemática.
  7. En enfermos colonizados por SARM se recomienda sustituir el betalactámico por vancomicina o cotrimoxazol. Esta pauta también puede estar indicada en enfermos procedentes de centros sociosanitarios con tasas elevadas de colonización por este microorganismo (ej: fractura, enfermos vasculares con úlceras crónicas). En los enfermos colonizados por enterobacterias productoras de betalactamasas de espectro extendido, debe considerarse la utilización de ertapenem.
  8.  Si se utiliza vancomicina y/o gentamicina durante > 72 horas debe realizarse ajuste-monitorización del fármaco, sobre todo si el paciente tiene insuficiencia renal.
  9. Ante cualquier situación especial y/o duda puede consultarse con el Servicio de Enfermedades Infecciosas.